Desde la Liga Argentina por los Derechos Humanos (LADH) creemos que para terminar con el macrismo no alcanza con derrotar a Macri, hace falta un proceso de luchas para reconquistar y conquistar derechos y esa lucha requiere de un programa. Un programa para conquistar la democracia verdadera.
El movimiento de lucha por la Memoria, la Verdad y la Justicia, lxs luchadores por los derechos humanos y el conjunto de fuerzas que han resistido el avance de las políticas de entrega, miseria y represión al pueblo, políticas colonialistas en favor del dominio de los grupos económicos y el gobierno de los Estados Unidos tiene ante sí el desafío de alcanzar la victoria en esta larga y difícil lucha: terminar con el neoliberalismo en su nueva expresión brutal, deshumanizante, cruel y perversa, que ha llevado a límites históricos los espacios de libertad, el buen vivir del pueblo y casi ha terminado con las garantías constitucionales de lo que se conocía entre nosotros como “Estado de Derecho”.
En estos meses de transición se desplegará -es indispensable que así sea- un debate de carácter programático práctico sobre las políticas públicas que se exigen al actual gobierno y se postulan para uno nuevo, de carácter popular, que necesitamos conquistar entre todas y todos.
Desde la LADH entendemos que el Movimiento de Derechos Humanos debe jugar un rol fundamental en este proceso. Nuestra historia, nuestra lucha, y lo que hemos aprendido en estos años, debe servir para enriquecer los debates del movimiento popular en la construcción de un proyecto autónomo. Desde nuestro lugar específico, un organismo de derechos humanos con más de ochenta años de lucha y reflexión que nació y siempre ha sido parte del movimiento popular, queremos aportar a ese debate algunas propuestas programáticas de carácter urgente, que consideramos indispensables para ganarnos el derecho de construir una Patria Libre.
Ofrecemos entonces, estos ejes programáticos que anhelamos sirvan como disparadores para el debate fraterno y sincero entre compañeros. No nos aferramos a ellos como amuletos vacíos, consignas intransigentes o fetiches discursivos. Se ofrecen para ser debatidos, enriquecidos, descartados complementados, en la búsqueda de la construcción plural y unitaria que será imprescindible para derrocar no solo a un gobierno particular, sino al modelo que este representa.
Quedarán para un momento posterior el debate sobre los caminos a fin de conquistar una democracia verdadera que no se agote en lo instrumental o formal, y que requerirá de una nueva Constitución Nacional para la que oportunamente aportaremos nuestra propuesta.
1. Libertad a las y los presos políticos y pleno respeto a las garantías constitucionales.
2. Fortalecimiento de los ámbitos constitucionales encargados de defender la democracia. Disolución de los actuales servicios de Inteligencia caracterizados por su permanente labor de creación de falsas noticias e informes que alimentan y sostienen la acción de estigmatización, persecución y represión a las fuerzas populares. Los servicios son la fuente de los fake news y el law fare, mentiras y causas fraudulentas.
3. Anulación de los decretos y reglamentaciones que limitan o anulan los derechos de los migrantes, los pueblos originarios, las mujeres, la infancia y que afecten los derechos económicos, sociales consagrados en la Constitución Nacional y los pactos asumidos por el Estado argentino. Oposición a todos los proyectos que impliquen la baja de la edad de punibilidad.
4. Democratización del poder Judicial de arriba abajo. Puesta en comisión de todas y todos los jueces y fiscales federales y revisión urgente de todas las causas judiciales armadas para perseguir al movimiento popular.
5. Inmediata anulación de las normas policiales, militares y de seguridad aprobadas por el gobierno macrista. Control político total de las fuerzas armadas, policiales y de seguridad. Separación de sus respectivos roles
6. Prohibición absoluta de reprimir y de utilizar armas de fuego en todas las expresiones de protesta popular. Preservación de la vida como principio fundamental en la actuación de las fuerzas de seguridad. Desmilitarización del Servicio Penitenciario Federal, cumplimiento de las acordadas de la Corte Suprema sobre los lugares de encierro y atención a las denuncias y requerimientos de la Procuración Penitenciaria Federal, la Comisión Provincial de la Memoria y otros organismos. Adopción de medidas legales inmediatas para liberar de las cárceles a todos los encausados por hurto u otros delitos leves, a quienes hoy suelen dejar encarcelados exclusivamente por sus antecedentes
7. Recuperación del proceso de Memoria Verdad y Justicia con el fortalecimiento inmediato de todas las instancias, secretarías y espacios de Memoria que el Macrismo ha debilitado y/o vaciado. Puesta en marcha de la Comisión Parlamentaria de investigación de los delitos económicos sociales y sanción ejemplar a quienes han procurado la impunidad de dichos crimen. Plan de Estado para cumplir la promesa del Nunca Más, juicio y castigo a todas y todos los responsables militares, empresariales, religiosos. Demanda internacional a los EE.UU. y sus socios por la complicidad manifiesta con aquellos crímenes y estas políticas coloniales. Políticas públicas de acompañamiento a las y los que aportan su testimonio a los juicios y reparación integral a todas las víctimas.
8. Compromiso del estado argentino con los valores de la paz y los derechos humanos en su política de relaciones internacionales e integración latinoamericana.
Este conjunto de medidas de emergencia procuraran generar las mejores condiciones para el incremento de la participación popular en procura de la construcción de un programa socio económico y cultural para que el pueblo tenga asegurado el acceso universal y gratuito, así como la permanencia, de todos los derechos humanos. Todo para todos es nuestro sueño y modo de entender los derechos humanos
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